13 razones por la que Calderón debe renunciar

13 razones por la que Calderón debe renunciar

1) No es posible eludir el tema de la responsabilidad individual del presidente. Más allá de su responsabilidad institucional. Cuando diputado participó en acuerdos con el PRI que lejos de beneficiar a la población la sumió en una larga y pesada carga de la que aún ahora estamos pagando.

2) Dado el estilo del presidente y su tendencia a involucrarse en las decisiones de sus secretarios de estado y de partido, no es creíble pensar que desconociera los acuerdos tomados por el dirigente del PAN Cesar Nava con la cúpula priista.

3) Este es tan sólo un ejemplo del patrón de encubrimiento a nivel nacional en que el presidente participó; un patrón ampliamente conocido y padecido por el pueblo de México. Desde que Calderón asumió su posición como diputado fue responsable de haber consentido con el PRI medidas que perjudicaron a los más pobres con la creación del Fobaproa y posteriormente del ipab.

4) No satisfecho con encubrir las denuncias abiertas de los funcionarios corruptos, permite que varias situaciones que mediante la transparencia efectiva pudieran descubrirse complicidades y demás corruptelas, que se emitan acuerdas para no permitir se sepan los contenidos sino hasta doce años después.

5) El caso de García Luna es especialmente escandaloso ya que se publicaron documentos, fotografías, una investigación muy completa de la construcción de una propiedad que tiene un valor superior a los 26 millones de pesos que bajo ninguna manera un secretario puede tener en propiedad, además de los subalternos de dicho secretario que tienen antecedentes penales, algunos que tienen ligas con cárteles de la droga así como de bandas de secuestradores.

6) Al caso García Luna se agregan la huida de mandos policíacos por estar involucrados con el crimen organizado o el intento por sobre todas las cosas de exculpar a la comandante Lore identificada por sus secuestrados.

7) Bajo su mandato, la añeja estructura burocrática del presidencialismo simplemente no ha encontrado la manera adecuada de procesar y lidiar con la avalancha de denuncias de violaciones a los derechos humanos por parte de las fuerzas armadas, de acabar con los abusos por parte de grupos de redes de pedofilia denunciados y documentados.

8) La presidencia no ha logrado adaptar su comportamiento insultar ante las exigencias de una cultura global crecientemente democrática y exigente. Basta recordar el caso de su partido de obstaculizar la promulgación de las leyes recientemente emitidas en el DF sobre libre decisión de embarazo matrimonios entre personas del mismo sexo. O a la oscura y sospechosa maniobra para acallar una vos del periodismo valiente de José Gutiérrez Vivó. Porque tanta libertad hasta para desprestigiar hasta el hartazgo mediante calumnias o afirmaciones sin presentar pruebas a políticos críticos del sistema político vigente.

9) Resulta sorprendente que el presidente no haya encarado la crisis de manera efectiva en más de tres años, crisis que desde el sexenio foxista venimos padeciendo, si no porque sus frases de campaña de “manos limpias” y “presidente del empleo”. Expertos y líderes de opinión y aún adversarios políticos advertían de lo que vendría convertido en una crisis sin precedente y no hizo nada, absolutamente nada por prevenir, baste recordar los catarritos y charquitos. Lo peor de todo es que jamás ha reconocido ningún error o falta y menos ha tomado medidas reales pera reparar los daños.

10) Las fallas del liderazgo presidencial se vuelven más obvias en medida de que sus funcionarios “actúan” sin seguir una política congruente a los intereses de la nación, cada quien ve por sus intereses. Las protestas del sector empresarial se han hechotas recurrentes, sobre todo las Pymes.

11) No hay otro manera de decirlo, ha quedado expuesto, después de años, un periodo negro en la figura presidencial en que no se ha atendido a las necesidades de los pobres que incluso han aumentado. El presidente carga con una gran dosis de responsabilidad que no puede ser ignorada o negada y por lo que se aprecia, continuará igual, con la pura verborrea.

12) El presidente no ha limpiado su propia casa debidamente, siguen las sospechas de ser favorecida la familia cercana a su esposa, siguen sin seguimiento el asunto de los Bribiesca, sigue la relación con la maestra, sigue sin “caer” el “caiga quien caiga”. Siguen los gobernadores haciendo de las suyas. Ni se pronuncia siquiera soslayando lo que se hace en entidades gobernadas por el PRI o el PAN.

13) ¿Cómo mantener la confianza y esperanza en alguien que no da resultados e incluso parece que encubriera a funcionario, gobernadores y demás escoria política?


Presentación de Texto basado en “13 razones por las que el Papa debe renunciar” publicado por Denise Dresser el 11 de abril en el semanario Proceso